Entre
las categorías del ámbito individual más relevantes identificadas como factores
protectores del embarazo no deseado (FPE), se encuentran la capacidad reflexiva
y el proyecto de vida. La presencia de la primera sería clave para potenciar
otros factores, principalmente la generación del proyecto de vida, el cual
puede expresarse en la continuidad de los estudios y en la necesidad de
concretar una independencia económica, ante el riesgo de establecer a futuro
una relación de pareja inestable o ante la probabilidad de vivir violencia
intrafamiliar. Estos dos hechos pueden modificar el proyecto de vida de la
adolescente por lo que deciden postergar su actividad sexual o prevenir el
embarazo a través del uso de métodos anticonceptivos, en el discurso es
expresado como «pensar lo que se va a
hacer» y «pensar ser mejor que
los papás...".
Entre
las categorías del ámbito familiar más relevantes identificadas como FPE
aparecen: "familia cuidadora" y "límites claros".
En
la "familia cuidadora" existe comunicación, confianza y control de
las situaciones de riesgo, expresado en el discurso como "te va a ver a la hora que sea",
este hecho hace que las adolescentes se sientan acompañadas, consideradas,
queridas y confiables, de este modo manifiestan preocupación por no "faltar a esa confianza"
para no defraudar el concepto positivo que se tiene de ellas.
Los "límites
claros" establecidos por la familia y dialogados con la adolescente
constituyen FPE cuando se internalizan en un contexto de confianza mutua.
En el ámbito social, la categoría más relevante que
aparece como FPE corresponde a la "sanción social" que se
expresa en la discriminación que experimentan las adolescentes que se
embarazan, esto evitaría la actividad sexual, principalmente de las mujeres